“La acción de gracias a Dios es un deber cristiano. Por esta razón, no debemos esperar a que ocurra algo especial para agradecer a Dios por sus bendiciones. Cada día y en todo momento, debemos tener presente la amorosa provisión de Dios para nosotros a lo largo de toda nuestra vida. Debemos ser agradecidos a Dios por todo lo material, espiritual, relacional, emocional e intelectual en la vida, es decir, por todas las situaciones y experiencias que vivimos en todas las esferas de nuestras vidas. No debemos dar por sentadas estas cosas, sino que, por el contrario, debemos acostumbrarnos a ver en ellas la generosa mano de Dios.”
Conforme nos aproximamos al final de este año, vamos acercándonos más y más en la cuenta de que el Señor nos ha permitido vivir un año más de vida con salud, sueños y con paz que sólo Él podría conceder. Esto nos ayuda a entender con mayor lucidez por qué el apóstol Pablo dice, “Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.”
Ahora bien, entre muchas otras bendiciones, Dios nos ha dado vida. A primera vista, ésta podría parecer una afirmación bastante trivial. Sin embargo, es interesante notar que cada minuto muren aproximadamente 108 personas en todo el mundo. Cuando ponemos nuestra vida y muerte en perspectiva, no es difícil comprender la bondad y la gracia que ha tenido, y tiene, Dios para con nosotros. Él nos ha librado de la muerte espiritual, pero también nos ha librado de la muerte física (este año). Tal vez fue un año difícil en diferentes sentidos. Tal vez tuvimos problemas en el ministerio, problemas familiares, de salud o de otra índole. No obstante, nuestro Padre ha sido fiel a lo largo del año. Por esta razón y muchas otras más, creo que es estos tiempos de fiesta y alegría debemos tomarnos por lo menos unos minutos para dar gracias a Dios, como los primeros peregrinos lo hicieron después de haber atravesado los turbulentos mares del atlántico.
Pensando en todo el año, podemos ver que—como los peregrinos a los que nos referimos hace unos momentos—mi familia y yo también tuvimos momentos de turbulencia en este año. Entonces, ¿cómo puedo tener paz después de haber experimentado esas turbulencias? ¿Cómo puedo saber que el próximo año no experimentaré turbulencias similares? La respuesta es, a grandes rasgos, que no lo sé; simplemente no estoy seguro de qué deparará el próximo año para mí y mi familia. Sin embargo, si analizo nuevamente las palabras del apóstol Pablo con mayor detenimiento me doy cuenta de que “la paz que sobrepasa todo entendimiento” no sólo viene después de haber superado la turbulencia. Más bien, el apóstol Pablo dice lo siguiente:
“Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.”
Cuando considero estos versículos, me doy cuenta de que Pablo nos está exhortando a darle gracias al Señor no sólo después de que el afán pasó, sino que le debemos dar acciones de gracias incluso antes de que la prueba haya concluido. Pero, si la prueba no ha concluido, ¿cómo puedo tener paz? Parece que la respuesta que da el apóstol Pablo es “Ni tú ni yo lo sabemos, porque está más allá del entendimiento humano”. Sin embargo, a pesar de nuestra falta de entendimiento, Dios nos dará paz abundante. Por esa razón, es de vital importancia que, a pesar de los asuntos que nos encontramos en el ministerio, podamos siempre reflexionar unos minutos y detenernos para presentarle una acción de gracias a aquel que ha sido (y es) bueno con todos nosotros en todo el tiempo.
Deiros, P. A. (2012). La oración en el ministerio (p. 52). Buenos Aires: Publicaciones Proforme.
Reina Valera Revisada (1960). (1998). (Flp 4.7). Miami: Sociedades Bı́blicas Unidas.
Esta cifra está sacada del censo realizado por la Central Intelligence Agency (CIA) en 2016: https://www.cia.gov/library/publications/the-world-factbook/geos/xx.html
jose guillen says
November 25, 2017 at 8:26 pmDar gracias a DIOS ohh pienso que mas aya de nuestro entendimiento…orar y no estar afanosos pienso para mi he puesto una causa en las manos de MI SEÑOR,,, ahora la respuesta en afirmativo o negativo no puede afectar mi confianza paz o como lo quieran ver el solo hecho de que EL esta escuchando nos esa esencia es la fortaleza mas grande de mi vida EL ESTA AHI Y SEA CUAL SEA LA RESPUESTA ES de alguien que estara ahi siempre
gracias
Marcos Gómez says
November 25, 2017 at 9:22 pmAmen. Bendiciones.
Marcos Gómez says
November 25, 2017 at 9:22 pmAmen, Bendiciones.