Acción de Gracias

Tengo vida; tengo salud; tengo amigos; tengo una familia que me ama; tengo vestido y casa; y, lo más importante, tengo a Cristo en mi vida. En esta temporada de Acción de Gracias, me parece que es relativamente sencillo empezar a pensar en la comida, la familia, la comunión con amigos y hermanos. Sin embargo, me parece que es de suma importancia recordar cuál es la razón por la que nos reunimos: dar gracias al dador de todos nuestros bienes. Sin Él estaríamos perdidos, y no merece menos de nuestra adoración y acción de gracias.

Recuerdo muy bien que en alguna ocasión en mi vida, sufrí de un problema de ansiedad muy fuerte. Durante ese tiempo, lo último en lo que pensaba era en agradecerle a Dios por sus maravillas y aún por permitirme pasar ese tiempo. Me parecía que Dios me estaba castigando por algún pecado que yo no conocía. No obstante, conforme pasó el tiempo, el Señor permaneció fiel, y me ayudó a sobrellevar este problema tan debilitante. Unos meses después me encontré a una persona que estaba sufriendo una situación parecida a la mía. En ese momento, me di cuenta lo que Dios había hecho. Si bien es cierto que en el momento de mi situación no veía ningún propósito en ello, a la larga me di cuenta de que Dios utilizó para bien lo que tal vez de entrada fue un momento poco placentero (para utilizar un eufemismo).

Quiero señalar que esto no siempre es fácil, pues tenemos que constantemente vivir la vida, y la vida no siempre es fácil. A veces la ansiedad nos mata; estamos tan deseosos de ver el futuro que no agradecemos el presente; nos sentimos sin un amigo en el mundo, como el salmista (Sal 88:18). A veces estamos tan ensimismados que olvidamos que tenemos a un Dios grande y cuya Providencia nos abraza, pese a que nosotros mismos no nos percatamos de ello. En este día de Acción de gracias, estemos agradecidos con todas las bendiciones del Señor. Y estemos agradecidos por todo lo que nos sucede, ya sea que lo percibamos como bueno o no. El Señor es bueno todo el tiempo, y su misericordia eterna.